Se refiere a la situación entre un Asegurado y la Compañía de Seguros.

¿Quién tiene mas y mejor información acerca del riesgo que se quiere asegurar?

Por ejemplo ¿Quién conoce mejor las características del vecindario de una vivienda para asegurarla contra el riesgo de Incendio y/o de Robo?

Sin duda que es el Asegurado.

Del otro lado, la Compañía de Seguros tiene alguna información para ese tipo de riesgo (en general, no la relacionada específicamente con la casa de Juan, nuestro hipotético asegurado.

Para concertar el contrato, la Compañía utiliza un formulario (Solicitud de seguro) con el cual obtiene mas información acerca del riesgo.

También puede, si le parece oportuno, realizar una inspección ocular del riesgo (mas información).

Luego de ello, se siente en mejor situación (mas informada) para establecer el PRECIO de la cobertura.

¿por qué hacemos esto los Aseguradores? ¿por qué no cobrar un precio PROMEDIO?

Porque de lo contrario, si carecemos de información suficiente, lo mas probable es que fijemos un precio ALTO para prevenirnos. Y aquí comienza entonces un círculo vicioso:  Mayor precio desalienta a Asegurados “buenos” (con menos riesgo) a contratar el seguro, luego la Compañía registrará mayores siniestros, consecuentemente deberá reajustar el precio y se reinicia el ciclo de pérdida de asegurados “buenos”.

Con mayor información, las tarifas son mas adecuadas a cada riesgo y cada cual siente que está en una situación “equitativa”. El Asegurado paga lo “justo” y la Compañía recibe lo “necesario” para responder por su compromiso.

Por suerte hoy la tecnología y las grandes bases de datos nos permiten fijar precios mas equitativos!!!

Es muy importante dar información confiable a la Compañía de seguros, porque es en beneficio de todo el grupo de asegurados!

El seguro es un mecanismo maravilloso, que nos permite “prevenirnos” de los riesgos a un costo bajo, cuantos mas seamos en el grupo, tanto mejor!!!!